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Con León en crisis de contagio, SSG decide hacer pruebas solo con cita previa
Falta de información, de credibilidad, de protocolos, de atención oportuna para un diagnóstico... los pacientes de COVID-19 tienen mucho qué decir. Son más que números
* Imágenes, infografías y gráficas: Juan José Plascencia
"Yo fui de esas personas que no creía en esta situación. No creía. Hasta que comencé a sentirme mal". Ahora, Adriana* (todos los nombres fueron cambiados) una mujer que confundió los primeros síntomas de COVID-19 con su asma, hoy enfrenta la enfermedad, junto su padre y otros familiares cercanos, mientras caen en lo que ella califica como "una pesadilla".
El ritmo de contagios en Guanajuato se ha visto ascender vertiginosamente: las cifras llegaron ya a los 3,225 casos acumulados y 194 personas residentes en el estado ha muerto. Este día, lunes 8 de junio, otras 114 personas se sumaron a la ola de pesares, de síntomas, de incertidumbre, mientras que nueve más perdieron la batalla y la vida por esta causa.
Aún así hay mucha gente que "no cree" en la enfermedad, como no conoce a nadie cercano que haya enfermado o muerto. Para ellos no es real. Al haberse liberado algunas secciones de los jardines y plazas comerciales, cómodamente se instalan a tomarse un helado o una selfie. "Son unos inconscientes, eso me da mucho coraje", cuenta Alex*, un joven que finalmente se ha recuperado tras 46 días en aislamiento.
Sin embargo, ahora mismo hay en Guanajuato al menos 2 mil 97 personas con la enfermedad activa. 210 están en hospitales, 50 están intubadas, en riesgo crítico.
Y muchos más, como Juan*, siguen haciendo fila en algún módulo para obtener la certidumbre que da el estudio de laboratorio. "Está súper mal toda la organización. No hay pruebas y las pocas que dan es para empleados de gobierno". Lo dice con conocimiento de causa, él lo intentó tres días. "... casi debes llegar muriéndote para que te la hagan".
El drama de dos hermanas y su padre
"Te comento que mi papá va mejorando. Lo tuvimos con oxígeno y suero intravenoso en casa. Pero bendito Dios, ya respondió bien", cuenta Verónica*, una de dos mujeres contagiadas en la misma familia. Hay días que se siente mejor y días peores. Aún así hace el esfuerzo por realizar las tareas de su escuela. Ella cree que se contagió en el trabajo y que quizá fue ella la fuente de contagio para su hermana Adriana y su papá.
Pero trata no ceder a la desesperación, aunque "Este virus es muy aferrado. Como que se encaja más y más" en el cuerpo.
Por su parte, Adriana retoma el hilo, y cuenta: "Son síntomas que no se los deseo a nadie. Empecé como si trajera algo atorado en la garganta. Y yo llegué a confundir la falta de respiración con mi asma, pero los dolores no eran normales. El dolor de cabeza es inexplicable intenso intermitente, aunado a las náuseas, fiebre y dolor de estómago, como si hubieses hecho abdominales (...) Este virus ataca a tus partes vulnerables, en mi caso son las vías respiratorias. Luego sucede que no se percibe ningún aroma, ningún sabor y es desesperante".
Esta familia vive en León, municipio que encabeza, por mucho, los contagios de cualquier otro en Guanajuato. Este día sumó 34 contagios a su cuenta, que va más allá de los mil 316 casos confirmados. Y solo este lunes registró una defunción confirmada. Fue un hombre de 43 años con diabetes que falleció en el Hospital COVID, de la calle 20 de Enero.
Pero ellos no quieren hablar de muerte. Quieren vivir.
Muere joven de 28 años, sin enfermedades previas
- Hombre de 28 años, residente de Celaya, falleció en hospital privado de Celaya, sin comorbilidades.
- Mujer de 70 años, residente de Apaseo el Alto, falleció en CECC Salamanca, comorbilidades: diabetes, hipertensión,
- Mujer de 63 años, residente de Doctor Mora, falleció en Hospital General San José Iturbide, comorbilidades
- Mujer de 51 años, residente de San Luis de la Paz, perdió la vida en Hospital General de San Luis de la Paz, comorbilidades: obesidad.
- Hombre de 43 años, residente de León, falleció en Hospital COVID, comorbilidades DM,
- Hombre de 65 años, residente de Salamanca, murió en Hosp. Regional PEMEX, padecía obesidad,
- Hombre de 53 años, residente de Salamanca, falleció en Hosp. Regional PEMEX, comorbilidades: obesidad.
- Hombre de 62 años, residente de Uriangato, falleció en Hospital General de Uriangato, diabetes y tabaquismo,
- Hombre de 39 años, residente de Salvatierra, falleció en Hospital General de Salvatierra, comorbilidades: obesidad.
"No creemos por tantas mentiras que hemos escuchado del gobierno"
Adriana continúa su testimonio: "Hay veces que las noches no se puede dormir por el miedo a no despertar, se siente desesperación y asfixia. Y poder dormir a ratos y despertar y sentir que ya vas a mejorar y que vas a percibir los olores y sabores de los alimentos. Que ya vas a levantarte ánimos y vas a estar bien y no es así".
Cuenta también que en el sentido emocional, se vuelve muy difícil "no poder abrazar a tus nietas, privarte de darles un abrazo, una caricia".
"¿Y cómo le explicas a una niña de 4 años que no le puedes abrazar ni arrullar, ni jugar con ellas y dejar que me peine y maquille a su manera? Mi día a día es frustrante. No sabes si es enojo, tristeza.
Pero sobre todo es el miedo latente, parece no tener fin.
La Secretaría de Salud informó que, de los 117 contagios nuevos en la entidad, además de los 34 casos en León, Celaya, Irapuato, Salamanca y Silao, incrementaron visiblemente sus cuentas. Tan solo los dos primeros sumaron otros 36 a la cuenta estatal.
La hospitalización, que ayer presentó un repunte, también se incrementó aunque más levemente: pasó de 207 a 210 casos en 24 horas.
Pero aún en los casos calificados como "leves" o "moderados", no es cosa fácil.
El asma agrava la condición de Adriana, quien, pese a todo, ha podido continuar su recuperación desde su casa. "Tu cuerpo te obliga acostarte". Pero ella confiesa que no creía en que la enfermedad existiera. "Esto no lo creemos por tantas mentiras que hemos escuchado del gobierno. Las personas vamos por ahí, por las calles, imprudentes, incrédulos y no los culpo".
"Yo tomé conciencia hasta que vi a mi papá en cama con un rostro que no era el de él. (...) mi papá, un hombrezote de su tamaño y ver que esta enfermedad se lo estaba acabando. Estaba irreconocible, en un día mi papá se acabó".
Sin embargo, hoy fue un día "bueno", don Pablo* se sintió mejor.

"Mi mayor preocupación era contagiar a alguien más"
Más allá de la enfermedad, el hecho que verdaderamente preocupaba a Alex* era que pudiera haber contagiado a alguien más, "mi novia, la familia de mi novia, la familia con la que vivo (rento un cuarto), me hacía sentir muy mal, entré en crisis de ansiedad".
Los síntomas de la enfermedad eran pocos, cuenta, comparados con el sentimiento de culpa de llegar a contagiar a otra persona, "no me perdonaría si hubiera contagiado a alguien o que incluso que causara algo catastrófico, algo en lo que ni siquiera quiero pensar".
El joven, de 27 años y sin enfermedades previas, describe sus síntomas de COVID-19 como la sensación de no poder respirar, la idea de estar en una piscina con el agua a la barbilla mientras algo le aplasta el pecho. Nunca ingresó al hospital ni le dio fiebre. Pero la espera de una semana para obtener el resultado de la prueba fue muy difícil, aunque desde el primer síntoma dejó de frecuentar a su novia y a otras personas, pero a veces tenía necesidad de salir a comprar de comer, él mismo cuidaba la sana distancia y usaba cubrebocas.
"Imagínate cuántas personas no saben que tienen el virus y andan en la calle. Veo a la gente sentada en las bancas del jardín, pese a que están clausuradas con las cintas, y me da mucho coraje ¿Por qué no se cuidan? Y encima sin cubrebocas. Gente inconsciente, por uno la llevan muchos."
Alex* pasó 46 días encerrado. Cuenta que lo llenaba de frustración de no poder hacer nada, y eso que cuenta con baño privado en su habitación. "¿Cómo le hacen las familias que tienen un enfermo en casa?", se cuestiona.
Test COVID, solo para casos MUY específicos

Juan* no ha esperado una semana. Su espera ha sido mucho peor: "acudí a hacerme estudios por 3 días y no alcanzaba pruebas. Hoy fue el colmo (en el módulo de la deportiva) salieron y dijeron 'solo aplicamos 25 pruebas diarias, no nos mandan más y tienen que ser con cita previa'".
Él vive en la zona del Coecillo, "llegué desde las 8 de la mañana a formarme, la atención es muy mala, no salen a decirte nada, solo esperas ahí sentado o parado. Dicen iniciar desde las 9 a 12. Y nada de eso salen hasta las 10 a tomar cuestionario. Y eso sí: a las 12 cierran, solo citas (...) eso sí: trabajadores del gobierno tienen prioridad, ellos hacen otra fila y los pasan primero.
Juan* lleva más de 10 días en cuarentena, pero quería hacerse el examen para salir de la incertidumbre. Pero no alcanzó muestra. "Casi debes llegar muriéndote para que te hagan" el estudio, y ahora dice que ha debido llamar para hacer la cita, sin embargo, se queja de una desorganización "total".
"Dijeron que si no tienes síntomas graves y has convivido con un COVID positivo, no te harán" el estudio.
La otra es pagar el examen en un laboratorio privado, la más barata tiene un costo de 1,300 pesos. "Pero en su mayoría no está para pagar ese tipo de costos", la mayoría de la gente que observó en la fila son obreros.
Las quejas por no respetar las filas que todos los días se forman afuera de los módulos donde toman las muestras para COVID-19, tuvieron consecuencias: El municipio de León informó por la mañana que a partir de este lunes las pruebas sólo serán realizadas a través de citas previamente agendadas únicamente a personas con las siguientes sintomatologías: Tos y/o fiebre y/o dolor de cabeza, que se acompañe de al menos uno de los siguientes: dolor o ardor de garganta, ojos rojos, dolores en músculos o articulaciones (malestar general).
"... el servicio es para las personas que no tienen ninguna seguridad social o pertenecen al INSABI, y quienes cuentan con otra seguridad social, deberán de acudir a la institución que corresponda..."
Sin embargo, la publicación fue borrada horas más tarde.
Discriminación, privilegio y esperanza
Aún sin resultado, Juan* cuenta que va a seguir la cuarentena, a continuar autoconfinado. Su trabajo le permite seguir laborando desde casa, una ventaja que no todos pueden.
Por su parte, Adriana* cuenta: "Mi hija es ama de casa y su esposo perdió el trabajo por la situación, pero pronto se pudo incorporar a uno nuevo. Y mi hijo trabaja fuera de la ciudad, y está en casa ahora", sin trabajo. "Algunos días amanezco con un poco de mejoría, otros no tanto, como ayer, que me sentía bastante agotada y por la noche comenzó el dolor en el pecho, confío en Dios". Con todo y la discriminación. "Ya vamos estar como en tiempos de los leprosos, que les ponían su tablita y campanita, así se siente uno. Como señalado".
Aunque hay señalamientos que son para bien, como cuando te sacan de la fila y te pasan primero que los que llegaron a formarse a las 5 a.m. para hacerse el test COVID, y solo hay 25 muestras y no alcanza para todos.
"Mucha gente no sabe esto y aún sigue formándose. Está cruel esto", se lamenta Juan*.
"Me tocó el caso de un señor mayor, lo veía mal, tosiendo, decaído, formado desde muy temprano, aún viéndolo así le dijeron 'no se le hará la prueba, porque ya no hay'. Hasta los mismos de la fila le decían a su hija 'llévalo hasta adelante, (y ahí) que lo pasen'. De verdad que te agüitas de ver estos casos y no poder hacer nada, cederles el lugar y para nada".
MÉXICO REGISTRA YA 120 MIL CASOS DE COVID-19
120,102 casos acumulados confirmados
14,053 decesos confirmados
18,416 casos activos
2,999 casos nuevos (reportados hoy)
354 defunciones (reportados hoy)
8 de junio de 2020, 17:34
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