POPLab Logo
12/5/2025
DDG 20/09/2025

DÍAS DE GUARDAR Domingo 21 de septiembre de 2025

PAN al espejo: entre la discordia y la agonía; ¿Tenemos Fiscal o inspector del trabajo?; La capital: batalla callejera y ausencia del Estado

Compartir:

    1.- El PAN, casi en la paz de los sepulcros

    La elección de dirigencias municipales del PAN transcurrirá entre dos extremos: la mayor de las calmas en casi todo el estado y unas cuantas batallas en algunos municipios clave, como Irapuato, San Luis de la Paz, Purísima del Rincón y Salamanca.

    La situación no es para echar las campanas a vuelo, a menos que sea para doblar a réquiem. Los comités municipales del PAN evidencian 12 años de abandono de la vida democrática, la cual fue sustituida por el poder de las burocracias del estado y los municipios. Donde hay competencia enconada es por los intereses a favor y en contra de algunos alcaldes.

    Fue el ex gobernador Diego Sinhue Rodríguez, un político de escasa trayectoria y proclive a la frivolidad, quien dijo con todas sus letras que los procesos democráticos internos “dividían al PAN”, tomando la participación de la militancia como una debilidad.  

    Y antes Miguel Márquez, el mentor de Sinhue, canceló las elecciones internas para decidir al candidato a gobernador y designó mediante un dedazo a quien a la postre se convertiría en su sucesor.

    Durante los seis años del pasado gobierno, las dirigencias panistas en el estado y los municipios fueron meramente ornamentales. Los candidatos a alcaldías y diputaciones se decidieron en pequeñas mesas en la cúpula del gobierno estatal y la operación electoral se trasladó del escenario partidista a la Secretaría de Desarrollo Social y Humano.

    ¿Qué pasó con la militancia? Quienes tuvieron la suerte de alcanzar cargos públicos de primer, segundo o tercer nivel, se disciplinaron a las indicaciones provenientes de la alta burocracia. Los que no lograron entrar a una nómina, se desentendieron de su participación y no son pocos los que ya militan en otras opciones partidistas.

    Hay municipios donde el PAN es oposición, en los que las oficinas del comité municipal están cerradas desde hace tiempo. Hay otros donde las dirigencias se encuentran en manos de empleados municipales y quien en realidad manda es el alcalde o la alcaldesa y a ellos lo que menos les interesa es un partido activo… y crítico.

    Y en otros, como en Silao, no se registró ningún aspirante a dirigir el PAN, no obstante que ese partido recuperó el municipio de Morena en 2024.

    Así que lo que ocurre en Irapuato, con una contienda vibrante entre la candidata de la alcaldesa Lorena Alfaro y la del exalcalde Ricardo Ortiz, algo que antes era normal en decenas de municipios, hoy parece más el estertor de una vida democrática en coma.

    Los panistas coaligados para resistir la imposición de Rocío Jiménez, la candidata de la alcaldesa Alfaro, han empezado a denunciar el empleo de recursos públicos para apoyar su postulación y para orientar el sentido del voto este domingo. Ya se registró el despido de un empleado en el DIF municipal por negarse a apoyar la opción oficial.

    La batalla parece la última de una época: si la victoria la consigue la aspirante oficialista, si no se investiga el uso de recursos públicos y se da carpetazo, probablemente estemos viendo el fin de la era panista en Irapuato. Pues los derrotados le harán la guerra a Lorena Alfaro y a su muy probable candidata, su hermana Valeria Alfaro, en 2027, cuando este partido enfrente una elección tan cerrada como la de 2024.

    Ese es el dilema que enfrentan, no solo el dirigente del PAN estatal, Aldo Márquez Becerra, llegado al cargo todavía por decisión de Diego Sinhue, sino incluso la gobernadora Libia Dennise García, quien hasta el momento ha limitado su participación en el proceso a un hackeo muy dirigido de la contienda en León, donde mantiene un pulso con la alcaldesa Alejandra Gutiérrez.

    Si se reaviva la vena democrática del PAN se corre el riesgo de potenciar la conflictividad y hasta de división al interior del partido, lo normal en un organismo vivo; pero si se mantiene la tentación de la unanimidad, las candidaturas únicas y el desaliento a la competencia democrática, el peligro es el de mantener al panismo sedado y en un estado casi catatónico: la paz de los sepulcros.

    Además de Irapuato hay elecciones con cierto nivel de tensión en municipios como Salamanca y Purísima del Rincón, pero siguen siendo excepción. En Salamanca la contienda se ve animada porque una de las candidatas recibe apoyo del municipio morenista y en Purísima el surgimiento de Charo Márquez, sobrina de Miguel Márquez, para romper el acuerdo de unidad, se antoja más la reedición de la vieja pugna del exgobernador con su sobrino Aldo.

    Una treintena de municipios tienen candidatos de unidad, en buena medida porque no se permitió el registro de opositores. 

    Operadores políticos cercanos a Aldo Márquez, como Gregorio Mendoza, de Pénjamo y Roberto Carlos Terán, de San Luis de la Paz, fueron ayudados con mucha mano negra disfrazada de rigidez normativa para dejar fuera a sus adversarios. En el primer caso, los damnificados fueron los exalcaldes Juan José García y Erandi Bermúdez; en el segundo quien pierde es el actual alcalde Rubén Urías. 

    Las contiendas, primero abiertas y luego semicerradas con maña reglamentaria, están permitiendo que afloren viejos resabios, mientras se quiere consolidar a nuevos cacicazgos regionales. 

    De lo que pase este domingo dependerán las dinámicas que definirán el nivel de competitividad de Acción Nacional en el 2027, sus potenciales candidatos y la recomposición de los grupos y corrientes del panismo, hoy más vivos que nunca

     Por cierto, salvo en León, no se nota la mano de la gobernadora en muchas de las decisiones que se perfilan. ¿Está dejando al PAN al garete o son sus operadores los que le están fallando?

    DDG 20/09/2025

    2.- El fiscal, tan campante y errático

    Conforme pasan las semanas, el actuar del fiscal general del estado, el exfuncionario federal Gerardo Vázquez Alatriste, deja más que desear en tirios y troyanos. En el gobierno estatal, desde donde lo impulsaron para liderar a la entidad autónoma por siete años, empiezan a estrujarse los cabellos.

    Y no se trata solo de que al sucesor de Carlos Zamarripa le encante la fiesta y la cantada y que se le vea en cosos taurinos con un capote en la mano, eso es lo de menos, o lo sería si sus resultados estuviesen hablando por él.

    Pero cada vez queda más en evidencia que los números de la FGE, de por sí deplorables en la era del super fiscal Zamarripa, irán en picada en los próximos años. Vázquez Alatriste no ha logrado integrar un nuevo equipo y tampoco consigue hacerse respetar por el que recibió.

    Su colaboración con el secretario de Seguridad, Juan Mauro González, dista mucho de ser la ideal. Si bien no se desean complicidades como las vividas en el pasado, sí se requiere de una comunicación extrema y de una coordinación absoluta, pues el panorama de violencia en el estado no cede. Esto no está ocurriendo y afectará la operación conjunta en la que está participando directamente la gobernadora Libia García.

    Pero además, las pachangas parecen estar afectando la objetividad y el sentido de la oportunidad de Alatriste, quien esta semana se exhibía firmando muy orondo un convenio de mejora de condiciones laborales con una empresa de productos agrícolas a la que hace algunos días había señalado como presunta responsable del grave delito de trata de personas. 

    Mientras el fiscal se disfrazaba de charro cantor y jugaba a ser un acomedido inspector del trabajo, pasaban cosas terribles en el estado.

    Se desató una ola de violencia en Valle de Santiago, con autos quemados y balaceras en plena vía pública. Se registraron ataques armados en San José Iturbide y San Francisco del Rincón. Las fosas de Irapuato, Guanajuato y Villagrán, que volvieron a ensombrecer las cifras de asesinatos en los meses de agosto y septiembre, permanecen inexplicadas y sin información sobre líneas de investigación y datos de las personas localizadas.

    Nada de esto parece inquietar al fiscal, dedicado en cuerpo y alma a construirse una personalidad farandulera como personaje de película de Luis Estrada. 

    Quizá Vázquez Alatriste no se ha dado cuenta de que llegó a encabezar el ministerio público de la entidad federativa que ha ocupado el campeonato de violencia homicida en México durante los últimos 6 años. Tal vez solo está feliz del enorme aparato de poder y el gigantesco presupuesto que le cayó del cielo y que nunca se había imaginado.

    Creíamos que no podíamos estar peor que con Zamarripa, pero estas semanas dejan en claro que probablemente nos equivocamos.

    3.- Ahora violencia política en la capital

    El pasado fin de semana, una marcha convocada por el ex candidato de Morena a la alcaldía y empresario de medios de comunicación, Jorge Rodríguez Medrano, fue violentamente enfrentada por un grupo de encapuchados que los superaban en número, en pleno centro de la ciudad de Guanajuato. 

    La batalla se desarrolló ante los ojos de ciudadanos y visitantes a lo largo de la calle Juárez, desde la presidencia municipal hasta las calles de Tepetapa, donde el ex aspirante a alcalde tiene su negocio.

    La marcha criticaba a la alcaldesa Samantha Smith y pedía su remoción. Las escasas docenas de manifestantes hacían innecesaria cualquier operación policial. De haber dejado que las cosas corrieran, no hubiera pasado de que pintarrajearan y colocaran letreros en la puerta del palacio municipal.

    En cambio, la llegada de las huestes de agresores, identificadas con el exalcalde panista Alejandro Navarro, esposo de la alcaldesa, colocaron las cosas en otro nivel. El mensaje no parecía ser solo contra Rodríguez Medrano, sino contra la multitud de críticos que ha sumado la pareja Navarro- Smith en siete años de control de la política municipal.

    Frente a esto, desde el gobierno estatal no se tuvo la menor operación para evitar el desaguisado o desactivarlo cuando ya estaba en marcha.

    Así como hace algunas semanas activistas ultras se plantaron frente a la gobernadora e interrumpieron su discurso en un salón de León, durante un congreso de “libertad religiosa”, de nueva cuenta la estructura de asesores de la Secretaría de Gobierno que encabeza el ex perredista Baltasar Zamudio Cortés desde hace algunos ayeres, quedó en evidencia.

    Y quien está pagando los platos rotos es el secretario de Gobierno, Jorge Jiménez Lona, quien no logra mostrar el músculo que requeriría su dependencia y menos el talante como para aspirar a futuros cargos políticos.

    Descuidos recurrentes como estos siguen dejando la sensación de que el gabinete va muy rezagado y lejos de la velocidad que Libia García le imprime a su estilo de gobierno.



    20 de septiembre de 2025, 19:58

    Explora más contenido de este autor

    Descubre más artículos y perspectivas únicas

    Compartir:

      Artículos relacionados a esta publicación

      Días de Guardar 13/09/2025

      Opinión

      DÍAS DE GUARDAR Domingo 14 de septiembre de 2025

      *Censura y debilidad institucional; *Batalla por el PAN en Irapuato; *Espadas, fiesta y precampaña


      Leer más
      13 de septiembre de 2025, 19:56
      Días de Guardar 30/08/2025

      Opinión

      DÍAS DE GUARDAR Domingo 31 de agosto de 2025

      *Libia García, la aplicación personal; *Desapariciones y estado omiso; *Espadas, el nuevo aprendiz de brujo


      Leer más
      30 de agosto de 2025, 20:05
      Días de Guardar 16/08/2025

      Opinión

      DÍAS DE GUARDAR Domingo 17 de agosto de 2025

      Diego Sinhue: dinero público para caprichos; Sapica: la vitrina del conflicto intestino del PAN; Municipios: en busca del recato perdido


      Leer más
      16 de agosto de 2025, 19:51